Banano, maná paradisiaco
Por Andrés Espinosa Fenwarth
En julio de 1957, el canciller alemán, Konrad Adenauer, pronunció un memorable discurso en el Bundestag, en el cual anunciaba que el Tratado de Roma respetaría el régimen de importación libre de aranceles para el banano de cualquier origen en Alemania. La realidad actual para el banano de América Latina es infelizmente distinta a la de entonces. Mientras que los 79 países del grupo ACP (África, Caribe y Pacífico) gozan de un régimen libre de arancel para el banano negociado en el marco de los Acuerdos de Asociación Económica suscritos con la Unión Europea a finales del 2007, tal como propugnaba Adenauer, los productores de banano de Centro y Sur América tienen que pagar desde el primero de enero del 2006 un arancel contrario a lo pactado en la OMC de 176 euros por tonelada de banano exportada a Europa.
El régimen europeo de importación de banano se mantiene en un limbo jurídico sin solución de continuidad desde hace un año, cuando la Unión Europea decidió desconocer el Acuerdo de Ginebra que ponía punto final a la más larga disputa comercial de la OMC. En la práctica, hasta ahora no ha funcionado tener dos instancias negociadoras paralelas, la OMC en el ámbito multilateral y el Acuerdo Comercial en el bilateral, que en lugar de sumar, se traban entre sí por la condicionalidad estrictamente aplicada por Europa que le otorga prelación a los países ACP y a la solución en la OMC sobre la negociación bilateral.
Según un reciente estudio de Giovanni Anania de la Universidad de Calabria, Italia, publicado por el Centro Internacional de Comercio y Desarrollo Sostenible con sede en Ginebra, Suiza, que analiza el posible impacto de un acuerdo en banano, estamos actualmente en el peor de los mundos: los ACP exportan su banano sin arancel y nuestra región no tiene un acuerdo negociado vigente que los reduzca, lo cual puede significar que las exportaciones de los países ACP a Europa suban un millón de toneladas para el año 2016, al tiempo que las exportaciones de los demás países bajan 970.000 toneladas.
En el evento que Europa acceda a reducir el arancel a 114 euros por tonelada en la OMC, en línea con el entendimiento multilateral que teníamos en julio de 2008, Anania sostiene que el precio doméstico en Europa disminuiría 10,7 por ciento; el consumo y las importaciones europeas aumentarían en 4,9 y 5,6 por ciento, respectivamente, y las exportaciones de banano de nuestra región se incrementarían en 515.000 toneladas para el año 2016. Los ingresos de las arcas europeas se verían mermados en 24,7 por ciento por la reducción del arancel, lo cual se traduciría en un ahorro equivalente para nuestros productores de banano.
Sin embargo, este cambio del régimen de importación de banano en la Unión Europea sería insuficiente para compensarnos por la pérdida de mercado que se deriva del diferencial arancelario existente con los países ACP. Le correspondería a la negociación bilateral complementar la multilateral y reducir el arancel a 60 euros por tonelada, según Anania, para que, como afirmaba Adenauer, el banano como ’maná paradisiaco’ regrese a la normalidad.
Fuente: Portafolio
