Correa no descarta acuerdo comercial con EE.UU. pero no un TLC
Correa no descarta acuerdo comercial con EE.UU. pero no un TLC
EFE - 27-8-07
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró hoy que no descarta la posibilidad de llegar a un acuerdo comercial con Estados Unidos, pero fue tajante en aclarar que éste no tendrá las características de un Tratado de Libre Comercio (TLC).
Correa, que se ha negado desde la campaña electoral a suscribir el TLC que Quito negociaba con Washington desde 2004, puntualizó hoy que la intención de su Gobierno es diversificar el mercado y no centrarse solamente en Estados Unidos, a donde ahora llega el 40 por ciento de las exportaciones ecuatorianas.
Aunque no detalló los términos del acuerdo que le interesaría con Estados Unidos, dejó claro en una entrevista con el Canal Uno de televisión, que debe ser un "acuerdo puntual de mutuo beneficio", con Estados Unidos, Europa y varias naciones asiáticas.
Correa reiteró que no rogará a Estados Unidos por la aprobación de una nueva extensión de las preferencias arancelarias (ATPDEA, por sus siglas en inglés) tras la que se logró en junio pasado.
Insistió en que el ATPDEA es un reconocimiento y no una dádiva por la lucha de los países andinos contra el tráfico de drogas.
Por otra parte, afirmó que "jamás en la historia del país ha habido un proceso tan democrático como el actual" y advirtió de que "si Lucio Gutiérrez gana (las elecciones a la Asamblea Constituyente) vamos a entrar en un caos".
Se refirió así a las elecciones del próximo 30 de septiembre, en las que los ecuatorianos designarán a los 130 integrantes de la Asamblea Constituyente, que redactará una nueva Carta Magna.
Correa repitió que su posición personal es favorable a la reelección presidencial inmediata, como existe para el resto de los cargos del Estado, pero indicó que el Gobierno no impulsará esta medida en la Constituyente
En ese sentido dijo que la Asamblea decidirá cuándo deben comenzar y terminar los mandatos.
El jefe de Estado reiteró que presentará la renuncia a la Asamblea en día en que ésta tome posesión e insistió en que ésta debe disolver al actual Parlamento para dar paso a la conformación de una Comisión Legislativa, designada por la propia Asamblea y que se estructurará en forma proporcional a ella.
Al referirse dolarización, en vigor desde el año 2000, Correa dijo que la mantendrá pero consideró un "accesorio" a la nominación de la moneda oficial en la nueva Constitución.
El nombre de la moneda nacional "puede disponerse por Ley o decreto", señaló al tiempo de indicar, por otra parte, que no le parece que el nombre de Dios deba aparecer en la nueva Carga Magna al ser el ecuatoriano un Estado laico.
Correa se declaró partidario de terminar con "toda clase de discriminación", entre ella la sexual.
En lo económico, ratificó que no le preocupa lo que digan los especuladores en el mercado internacional y puntualizó que pagará la deuda externa siempre y cuando el país tenga capacidad pues "primero responde por la deuda social" interna.
Señaló que el peso del servicio de la deuda está en 19 por ciento del presupuesto del Estado y que aspira que al final de su mandato, en enero de 2011, baje hasta el 10 ó el 12 por ciento.
Sobre el presupuesto para el próximo año, dijo que éste podrá adaptarse a las nuevas decisiones que en materia económica adopte la Asamblea.
En ese sentido se refirió al Impuesto al Valor Añadido (IVA) que está en 12 por ciento y planea bajarlo en dos puntos.
Desmintió recientes versiones de un diario extranjero sobre una supuesta fuga de capitales por 3.000 millones de dólares y dijo que el sistema financiero local está normal.
Correa aseguró que él y sus ministros son "soldados de la revolución ciudadana" para combatir en la "guerra" contra la corrupción y contra algunos medios de comunicación que considera "mediocres".
Pidió respeto y diálogo a la prensa y advirtió que ni él ni sus ministros acudirán a medios de comunicación que los insulten.
Para Correa, su función es ser "motivador" porque hay que "levantar la moral de la gente", según dijo.
