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Ecuador no quiere un TLC con la UE

14-5-09

Ecuador no quiere un TLC con la UE

El Gobierno insiste en que solo negociará si se incluyen temas de cooperación y desarrollo. El futuro del proceso es incierto.

Redacción Negocios, AFP

Mientras el sector empresarial arremete contra la falta de claridad del Gobierno en torno a las negociaciones comerciales con la Unión Europea (UE), la Cancillería defiende su posición de que “no se firmarán tratados de libre comercio sino acuerdos de desarrollo”.

La semana pasada, Ecuador participó en Bruselas en una nueva ronda de negociaciones para alcanzar un acuerdo comercial. La actividad diaria tuvo distintos matices. Así, el lunes 4 de mayo, el reporte del jefe negociador ecuatoriano, Méntor Villagómez, aseguró que “el negociador de servicios de la UE dijo preliminarmente a su contraparte ecuatoriana que debían considerar suspender la negociación hasta tanto se aclare la voluntad política de Ecuador de continuar”.

Ante ello, Villagómez “ratificó que Ecuador persigue un acuerdo para el desarrollo y no un acuerdo de libre comercio”. Y afirmó que la UE está dispuesta a respetar las condiciones de la nueva Carta Política, por lo que Ecuador se comprometió a brindar una sustentación más amplia sobre estas limitaciones. Hay la decisión tanto del Gobierno como de la UE de avanzar a otro ritmo. La UE dejó en claro que era una negociación que tenía como marco la Organización Mundial del Comercio (OMC)”.

El martes 5 de mayo, Villagómez señaló que “hubo un mejor ambiente. La aceptación de la UE de incluir un capítulo sobre cooperación fue tomado como un avance importante, toda vez que satisface una directriz política fundamental. Debido al atraso de varias mesas, se anticipó la necesidad de dos rondas adicionales”.

El miércoles 6 de mayo, el resumen afirmó que “no hubo hechos destacables. Aún no quedó claro cuán dispuestos estarán los europeos a aceptar las limitaciones en los compromisos ecuatorianos, derivados de la aplicación o interpretación de la nueva Carta Política ecuatoriana”.

El jueves 7 de mayo, se definió la fecha y lugar para la siguiente ronda: 15 al 19 de junio, en Bogotá.

Ayer, después de la ola de críticas de los grupos empresariales del país, respecto a que se estaría frustrando un nuevo acuerdo comercial como sucedió con EE.UU., el vicecanciller ecuatoriano, Lautaro Pozo Malo, insistió nuevamente en que el tratado deberá incluir elementos de cooperación y desarrollo. “De momento estamos negociando ese convenio de tres patas con la UE”, indicó en Praga, ayer, en una cumbre entre la UE y el Grupo de Río.

Por su parte, el delegado presidencial ecuatoriano para Economía y Comercio, Ramón Torres, espera que en cada una de las 13 mesas donde se debate el acuerdo queden identificados aspectos de cooperación.

Así está el avance de algunas mesas

En Agricultura, el acceso del banano quedará pendiente hasta el último momento de la negociación. El sector avícola y la carne de cerdo podrían ingresar. La UE respetará el sistema de franja de precios en la cadena de oleaginosas.

Los europeos no muestran mucha flexibilidad en la Mesa de Servicios. El capítulo de establecimientos es delicado, no se ven salidas claras. Sobre la protección de inversiones y el conflicto entre inversionistas, tampoco hubo avances.

La Mesa de Propiedad Intelectual sigue en discusiones. No hay avances concretos, excepto en derechos de autor. Sobre marcas, la UE pide la adhesión al Convenio de Singapur y al Protocolo de Madrid. Los andinos no lo aceptan.

En la Mesa de Comercio y Desarrollo se abordó el tema de la pesca ilegal y no regulada. La UE enfatizó en la trazabilidad para saber cuál es la procedencia del pescado (con posibilidad de controles satelitales). Ecuador se negó.

La propuesta del país en la Mesa de Compras Públicas es bien vista. Sin embargo, la UE no acepta la norma del Comexi, respecto a que si hay igualdad entre un proveedor ecuatoriano y otro europeo, se daría prioridad al nacional.

En Asuntos Aduaneros se ha avanzado bastante con el articulado de cooperación y asistencia. Ecuador insistió en lo del trato especial y diferenciado. La UE no acepta esos términos en el texto. La mesa está cerca de cerrarse.

En Acceso no Industrial, el acceso del camarón está en estudio por parte de la UE. Por otra parte, los europeos piden que se revise el impuesto discriminatorio (ICE) a los automóviles europeos de alta gama y bebidas alcohólicas.

La Mesa de Origen determinó que no será necesario un certificado de origen para exportaciones menores a 6 000 euros. Para la UE es vital el abastecimiento de azúcar y cacao de sus ex colonias, sin que eso signifique una restricción.


 source: El Comercio