Preocupa a ecuatorianos firma de TLC con EE.UU.
Quito, 10 nov 2005 (PL) Los insistentes reclamos de grupos sociales e indígenas ecuatorianos de que la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos sea consultada al pueblo, evidencian hoy el rechazo a dicho acuerdo.
Una oposición popular, obrera e indígena, cada vez más fuerte, demanda que en la propuesta de consulta popular se pregunte al pueblo si se debe rubricar el TLC, a lo cual se ha negado hasta ahora el Gobierno.
Para la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), si el Ejecutivo suscribe ese tratado será el responsable del peor acto de traición a la Patria, lo cual desencadenará una convulsión social incontenible.
Luis Maca, líder de la CONAIE, advirtió que los indígenas y la ciudadanía ecuatoriana no consentirán la privatización de los recursos naturales, el agua, el petróleo, los páramos, los recursos de la biodiversidad (genéticos y biológicos) y la propiedad intelectual.
Está en juego la pertenencia de los conocimientos ancestrales de los pueblos, la supervivencia del mercado interno, con la producción agrícola que resulta la base de la seguridad alimentaría, denunció.
El máximo representante de la CONAIE aseveró que la firma del TLC equivale a embargar no sólo bienes sino la vida de las presentes y futuras generaciones de ecuatorianos, que estarán sometidos a las leyes de las transnacionales y a la geoestrategia de Washington.
Con ese pacto, considerado como una nueva forma de colonización, la población y el Gobierno no podrán actuar en defensa de los intereses nacionales, pues los acuerdos del TLC estarán por encima de cualquier Constitución de la República, aseveró.
"No estamos dispuestos a pagar patentes sobre nuestras semillas y nuestras plantas ni a permitir la contaminación con transgénicos, cuyas consecuencias pueden parecerse a la temible "gripe aviar", señaló.
Los pronunciamientos de líder indígena se registran poco después de que la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) denunciara que Estados Unidos pretende imponer el TLC al Ecuador, Perú y Colombia.
El arzobispo de Portoviejo y ex presidente del Episcopado, monseñor Mario Ruiz, resaltó ayer que "la gran potencia del norte dice, o firmas o firmas, y si no firmas te hundo, te aniquilo".
El ex líder del Episcopado reconoció que algunas naciones como el Ecuador, dependientes de su comercio con Washington, no son libres y vaticinó una difícil situación para la ciudadanía.
Destacó la necesidad de recordar la experiencia mexicana, que tras firmar un acuerdo de Libre Comercio con el vecino del norte, ahora sus tortillas las hacen con maíz estadounidense.
El monseñor Ruiz reiteró que los países en desarrollo deben unirse para negociar en mejores condiciones frente a potencias como Estados Unidos.
