TLC contra productores agrícola
TLC contra productores agrícola
15-10-10
Hace veinte años, los mandatarios: Carlos Salinas, de México; George H. W. Bush, de Estados Unidos y Martin Brian Mulroney, de Canadá, atestiguan la firma del Tratado de Libre Comercio. Solo para recordar: en aquel entonces Salinas declaró: “Bush pidió apertura petrolera en el TLCN, me negué”.
Estados Unidos ha ejercido una y mil maneras para sabotear las exportaciones de granos, frutos y hortalizas. En tiempos recientes, Barack Obama promulgó una ley que bloqueaba los fondos para el acceso de camiones mexicanos. En protesta, México aplicó medidas de represalia comercial por 2 mil 400 millones de dólares contra productos estadounidenses. Obama reculó, el asunto quedó saldado y las sanciones levantadas luego de una nueva iniciativa que eliminó la prohibición.
Estados Unidos también sube los aranceles a su conveniencia, veta productos como el aguacate, jitomate y otros, hasta que les cae plaga o catástrofes naturales a los cultivos de allá, entonces vuelven a comprar como si nada.
Mientras Canadá y Estados Unidos se aseguraron que sus productores agrícolas fueran proveedores de su mercado interno y Canadá obligó a las franquicias, tanto de supermercados, restauranteros y demás a consumir; leche canadiense, quesos canadienses, aceite de canola canadiense. El Gobierno mexicano, candil de la calle como siempre, abrió en forma irrestricta la oferta de productos agrícolas importados, con precios protegidos con el 1.3 por ciento (de hace 20 años).
El afán de Salinas era cerrar la negociación firmando cuanto antes. Y después, ya se le ocurriría alguna, o varias frases demagógicas, para justificar las consecuencias de lo que firmamos. Con su bendición, su hermanito Raúl importó maíz de desecho para venderlo en Conasupo.
Por si fuera poco, con el Robaproa ( con r de robo) de Ernesto Zedillo, salvó a los bancos y a los multimillonarios y despojó a los agricultores mexicanos hasta de sus instrumentos de labranza, embargó sus tierras porque no pudieron pagar los créditos de usura criminal de Banrural-bandidal.
