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Honduras en el ALBA: nuevas respuestas a viejos problemas

5-8-08

Honduras en el ALBA: nuevas respuestas a viejos problemas

LÍDICE VALENZUELA

La anunciada adhesión como miembro pleno de Honduras al mecanismo integracionista de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) puede constituir una esperanza para mejorar la calidad de vida en esa nación de 7,5 millones de habitantes, considerada una de las más pobres de Centroamérica.

El interés de convertirse en el socio número seis de esa iniciativa regional fue anunciado por el presidente hondureño, Manuel Zelaya, durante la clausura de la reciente reunión de Ministros de Agricultura de Petrocaribe celebrada en Tegucigalpa.

Zelaya, cuyo país es miembro de Petrocaribe, ente petrolero regional nacido como el ALBA por iniciativa del presidente venezolano, Hugo Chávez, brindó la información ante los titulares de Agricultura de ese organismo reunidos para formalizar la creación de Petroalimentos, con un fondo inicial de 450 millones de dólares destinados a incrementar la producción agrícola entre los socios.

Para el mandatario, "con el ALBA se abren nuevas oportunidades para el país, para los pobres de la región. Manteniendo los esquemas tradicionales no saldremos adelante. Los planes unionistas promovidos por Venezuela son una nueva respuesta a viejos problemas que no tuvieron soluciones con las estructuras actuales en casi todos los países de América Latina".

Le sobran razones a Zelaya para tal afirmación. Honduras, que firmó un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos (al igual que el resto de Centroamérica, con excepción de Costa Rica, que aún no ha podido ponerlo en práctica), está estancada entre los vericuetos de la economía de mercado, sin resultados hasta ahora en la mejoría de calidad de vida de sus ciudadanos.

Al contrario de los TLC, cuya sustentación es la expansión de los intereses financieros norteamericanos en detrimento de las economías nacionales, debido a las asimetrías financieras existentes, el ALBA fundado en el 2004 por Venezuela y Cuba tiene como centro al ser humano y sus mecanismos se basan en la solidaridad y la cooperación entre los pueblos.

A los dos primeros aliados en este nueva estructura que rebasa los dispositivos económicos para adentrarse en los sociales, como la educación, la salud, la cultura y el deporte, entre otros, se unieron posteriormente Bolivia, Nicaragua, Dominica y ahora Honduras, esta última pendiente de la aprobación del Congreso Nacional.

Son muchas las naciones que se benefician del ALBA, uno de cuyos brazos mas poderosos es Petrocaribe, que también enrumba ahora a estabilizar otros sectores económicos, como el agrícola, con la conformación de Petroalimentos. Además de los seis miembros plenos del ALBA y los 18 de Petrocaribe, otros estados latinoamericanos también mejoran las condiciones de vida de sus ciudadanos, con la adscripción a proyectos del ALBA, como la Operación Milagro, para devolver la visión a personas de bajos ingresos, o las campañas de alfabetización, ambas con la colaboración de profesionales cubanos y venezolanos.

Zelaya conoce que será muy difícil que Honduras avance tanto en lo económico como en lo social si basa sus esperanzas en las actuales estructuras neoliberales allí imperantes.

Nación eminentemente agrícola, ha sufrido en los últimos años el embate de destructivos fenómenos climatológicos, como casi el resto de Centroamérica, sin una organización que proteja a su población. Puede decirse que ese país, donde antes vivieron importantes pueblos originarios de la región, sobrevive gracias a las remesas que envían los millares de hondureños residentes en Estados Unidos u otros países.

Sin el esfuerzo de esos ciudadanos obligados a emigrar por la carencia de condiciones para llevar una vida digna, posiblemente sería imposible la supervivencia nacional, carente de un cuerpo productivo eficiente. Gran parte del ámbito económico está dominado por las actividades especulativas, según coinciden expertos internacionales.

A pesar de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) se ha encargado de felicitar a Honduras por el supuesto crecimiento de su economía gracias a las remesas de divisas, ello no ha impedido (no puede olvidarse la redistribución de la renta) que los habitantes de más de 40 municipios de ese pequeño territorio centroamericano viven en condiciones de extrema pobreza.

A fines del pasado año el Gobierno decretó un aumento del 9,7 por ciento en el salario mínimo para los trabajadores, que en promedio es de unos 181 dólares mensuales. Sin embargo, el precio de la canasta básica en junio pasado fue de siete mil lempiras (moneda nacional), unos 365 dólares.

Al alto precio de los combustibles se unió el incremento de las tarifas de energía eléctrica siguen repercutiendo en el valor de los alimentos y materiales de construcción, en tanto se anunció que habrá un ajuste en el valor del pollo, huevos y leche.

CARENCIAS DE UNA GRAN MAYORÍA

Cerca del 90 por ciento de la población hondureña es mestiza (indígenas con europeos), el siete por ciento es indígena, el dos por ciento negra y el uno por ciento de origen europeo. La mitad de la población vive en el campo y la otra mitad en las ciudades.

El Sistema de las Naciones Unidas en Honduras presentó en el 2007 el segundo informe sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).

Por cada 100 hogares hondureños, indicó el texto, 62 continúan sin los ingresos suficientes para cubrir sus necesidades alimenticias y otros requerimientos básicos, como vivienda, educación, salud y transporte.

La situación económica es desesperante, al menos para la inmensa mayoría de los habitantes de esa nación centroamericana.

Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) la miseria no sólo se encuentra entronizada en las áreas rurales.

Por ejemplo, en el Distrito Central hay 33 mil hogares, con 189 mil 929 familias, en pobreza extrema.

De acuerdo con los datos del INE, en el país hay 127 mil 089 viviendas construidas con bahareque y un 16.8 por ciento de sus habitantes vive en hacinamiento. El porcentaje de pobreza en el municipio de Intibucá es de un 74.8 por ciento, cifra que supera el índice a nivel nacional, que es de un 60.6 por ciento.

En una encuesta realizada por ese organismo, la mayoría de las familias confirmaron que apenas sólo comen frijoles, una vez al día. Una mujer identificada como Emma dijo al periódico El Heraldo que "ahora casi ni comemos frijoles, sólo tortillas con sal y arroz, porque dos libras y medias de grano cuestan 42 lempiras. No queda dinero para medicinas, ropas, zapatos ni educación".

Uno de los problemas sociales mas graves de Honduras es la educación. Un millón y medio de niñas y niños no asisten a la escuela. Donde hay edificaciones, los materiales didácticos son inexistentes. El analfabetismo en los mayores de 15 años es del 25%, aunque tales estadísticas resultan insatisfactorias, ya que incluso hay un alto número de ciudadanos que jamás han puesto un pie en un colegio y ni aparecen en los censos oficiales.

Cifras actualizadas precisan que la mortalidad infantil es de 42% por cada mil nacidos vivos, en tanto las mujeres tienen, como promedio, cuatro hijos. Mas del 27.4 por ciento de los niños y las niñas se encuentran en estado de desnutrición crónica, informaron agencias de la ONU el pasado año cuando se analizaron las Metas del Milenio en ese estado centroamericano.

Con sólo un 20% de las carreteras del país asfaltadas, en los departamentos de San Marcos de la Sierra Choluteca, Lempira, Ocotepeque, Santa Bárbara, La Paz y Gracias a Dios, por citar algunos ejemplos, la población carece de servicios básicos elementales, como agua y saneamiento, de acuerdo con la ONU.

Según esa fuente internacional, el 61% (598 mil 724) de hogares encabezados por hombres es pobre, y el 64,2% de los dirigidos por mujeres están en igual condición.

Para la ONU, hogares en pobreza son aquellos cuyos ingresos per cápita se corresponde con el costo de la canasta básica, la que incluye necesidades de vivienda, educación, salud y transporte, entre otros índices.

En extrema pobreza son los que poseen un ingreso per cápita inferior al costo de la canasta básica.


 source: Cuba en noticias