bilaterals.org logo
bilaterals.org logo
   

Se podrá avanzar con el TISA sin necesitar luz verde del Mercosur

Se podrá avanzar con el TISA sin necesitar luz verde del Mercosur

Por El Observador, 21-4-15

De superarse las resistencias internas que presenta la participación de Uruguay en la negociación para el acuerdo global de servicios (Trade in Services Agreement, TISA), el gobierno tiene a favor que, para este tipo de tratados, no requiere del visto bueno de los socios del Mercosur.

Argentina, Brasil y Venezuela no son parte de las negociaciones del TISA –sí lo es Paraguay–, un acuerdo que impulsó Estados Unidos y la Unión Europea, y al que ahora China pidió entrar, con el objetivo de liberalizar los servicios.

Está el antecedente de los socios del Mercosur que bloquearon a Uruguay cuando en el primer gobierno Tabaré Vázquez (2005-2010) intentó iniciar negociaciones para firmar un Tratado de Libre Comercio (TLC) con EEUU, camino del que luego desistió.En aquel entonces, como ahora, en el Frente Amplio hubo resistencias internas. El Partido Comunista ya anunció que rechaza el acuerdo TISA.

En el caso de los servicios, los socios regionales no tienen potestades para vetar la participación de Uruguay en el Trade in Services Agreement, según distintas fuentes consultadas. El embajador de Uruguay en Brasilia, Carlos Amorín, comentó ayer a El Observador que Brasil no hizo ninguna consulta sobre la negociación de Uruguay, ni tampoco objetó el diálogo.

El tema seguramente estará en la reunión de los presidentes Tabaré Vázquez y Dilma Rousseff que será el mes próximo. Otro punto de la agenda de ese encuentro será el acuerdo comercial que negocia el Mercosur y la Unión Europea y que Argentina logró retrasar. Los socios del bloque pueden vetar decisiones vinculadas a acuerdos comerciales que se firmen por fuera del Mercosur. Eso es válido, por ejemplo, para la negociación con Europa, pero no para el TISA porque no hay aranceles en juego.

Negociadores de la cancillería están convencidos de que Argentina y Brasil no tienen, en el TISA, derecho a veto en el entendido de que el compromiso que existe en el Mercosur es sobre negociaciones que impliquen preferencias arancelarias.En el mismo sentido, Marcos Soto, analista senior de la consultora PwC, dijo ayer a El Observador que siendo que los servicios no están sujeto a aranceles, sino a otro tipo de tratamiento, “no están alcanzados por la decisión 32 del Consejo del Mercosur que prohibió la realización de acuerdos bilaterales o con grupos de países por fuera del bloque”. El TISA empezó a negociarse en 2012 y el gobierno de José Mujica expresó su deseo de participar.

La aceptación para integrarse al diálogo llegó en diciembre pasado y en febrero de 2015 fue la primera reunión que integró Uruguay. Se trata de un acuerdo de 24 partes, entre los que figuran EEUU, la Unión Europea, Canadá y Australia. De la región están Paraguay, Perú, Colombia y Chile. El TISA propone liberar servicios y, entre otros aspectos, abre la puerta a la participación de extranjeros en las empresas públicas, algo que el PIT-CNT rechazó de plano. De todas formas, el canciller Rodolfo Nin Novoa aclaró que la negociación se hace con “listas negativas” donde los países colocan las áreas que protegerán y, por tanto, que no serán parte de la liberación.

En el caso de Uruguay, explicó, se defenderán los monopolios estatales de las telecomunicaciones, refinación de combustibles y agua potable.Nicolás Albertoni, licenciado en negocios internacionales e integración, opinó que a Uruguay “le conviene” ser parte de las negociaciones del TISA.

En diálogo la semana pasada desde Washington con El Observador TV, afirmó que Uruguay “debe conversar” porque lo contrario es quedarse solo. “Con alguien se tiene que permitir dialogar. Algunos dicen no al TISA, y entonces es ¿sí a qué?, ¿a depender de Brasil?”, se preguntó Albertoni.

Parte de la izquierda está en contra de negociar

El Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio evaluó ayer la necesidad de congelar la discusión pública sobre el TISA hasta después de las elecciones departamentales del 10 de mayo, para que la fuerza política se concentre en los comicios. La coalición se enteró del tema por la prensa, según dijo la presidenta Mónica Xavier. El canciller Rodolfo Nin Novoa fue convocado por el Frente Amplio a explicar el acuerdo global de servicios. El ministro irá luego de las elecciones municipales. El Partido Comunista rechazó el acuerdo, dijo a El Observador el secretario general, Eduardo Lorier. A su juicio, el TISA “es peor” que el TLC que se intentó firmar con Estados Unidos. También el PIT-CNT rechazó el acuerdo de servicios. Por otro lado, los empresarios de la Unión de Exportadores están a favor de todo tratado que pueda abrir una puerta para vender más.

El PIT-CNT se movilizará contra el acuerdo global de servicios

El PIT-CNT confirmó que el próximo jueves 23 hará una movilización donde, entre los puntos de la reivindicación, está la oposición de la central de los trabajadores al acuerdo global de servicios (TISA).

El rechazo fue planteado por dirigentes del PIT-CNT al presidente Tabaré Vázquez y también a los ministros Rodolfo Nin Novoa (Relaciones Exteriores) y Danilo Astori (Economía). Nin Novoa y Astori apoyan participar de las negociaciones que proponen liberalizar los servicios.

Por el contrario, la central obrera entiende que hay hasta cuestiones de soberanía en juego y ya en diciembre pasado su mesa representativa se declaró “en alerta”, dijo a El Observador el dirigente Marcelo Abdala. También dijo que ninguna de las gestiones hechas para informarse, durante este y el pasado gobierno, deben interpretarse como un aval al inicio de las negociaciones por parte del gobierno.

El paro del jueves es convocado desde las 9 de la mañana a la hora 13.00, con una concentración a las 10 en la explanada de la Intendencia de Montevideo. Habrá una marcha por avenida 18 de julio y un acto central donde se remarcará la posición sindical.

El rechazo al TISA será además uno de los temas que integrarán la plataforma del 1º de mayo, cuando se conmemorará el Día de los Trabajadores.

El comercio de servicios crece a un ritmo más fuerte que el de bienes y la demanda se triplicó en Uruguay en los últimos diez años, según datos de la consultora PwC. Además, los servicios implican empleo calificado que aporta valor agregado a las exportaciones, dijo el analista Marcos Soto. Sin embargo para el PIT-CNT el acuerdo global de servicios será contraproducente para los intereses de Uruguay.


 Fuente: El Observador