Indígenas ecuatorianos ratifican rechazo al TLC con EEUU
Quito, 17 ene 05 (PL) - El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE), Luis Macas, reiteró hoy su rechazo a la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos y criticó al gobierno nacional.
Con este acuerdo, "Estados Unidos quiere convertir esta parte del continente en un basurero del norte, y eso no podemos permitirlo", declaró Macas a la prensa.
"Ese tratado no puede pasar", subrayó el máximo representante de los indígenas del Ecuador, tras anunciar el inicio de un proceso de recogida de firmas para demostrar la oposición de la población a esa iniciativa.
Macas llamó a la ciudadanía a organizarse en los barrios y asociaciones, para hacer algo y no mantenerse indiferentes frente a un país que "se está derrumbando", aseveró.
En este sentido, criticó duramente al presidente Lucio Gutiérrez, que se aprovecho en el 2003 de los indígenas para llegar al poder y en alianza con los cuales gobernó durante los primeros seis meses de su mandato.
"Lo peor que ha hecho el Presidente es no tener una agenda de gobierno. Sus planes son diseñados por el Fondo Monetario Internacional y la oligarquía", resaltó.
El dirigente estimo que este es el momento de dar una respuesta ante la crisis político-institucional que atraviesa el Ecuador, y crear una tercera línea de acción, como alternativa a las de León Febres Cordero y Alvaro Noboa.
Se pronunció asimismo por la necesidad de formar un gobierno alternativo-popular, que represente los intereses del pueblo ecuatoriano.
Elegido presidente de la CONAIE a finales de diciembre último, Macas dijo que "el movimiento indígena va a asumir su rol histórico frente a esta situación", y analizará la situación con otras formaciones, agregó.
Macas invitó a todos los sectores populares, campesinos, trabajadores, maestros, estudiantes y jubilados a unir fuerzas para construir algo distinto, algo que los represente.
Finalmente, reconoció que al interior de la CONAIE existen fisuras que se deben reparar mediante el diálogo y responzabilizó al gobierno de Gutiérrez de haber hecho todo lo posible para tratar de fracturar al movimiento indígena del Ecuador.