Uruguay aspira a liberar 90% del comercio con UE
Por EFE, 12-4-14
El Mercosur avanzó esta semana en una oferta conjunta para desgravar el 87% del intercambio con el viejo continente
Cuatro países que integran el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) cerraron esta semana una oferta conjunta para un Acuerdo de Libre Comercio (TLC) con la Unión Europea (UE), que el gobierno uruguayo espera que alcance el 90% del universo arancelario, dijeron a El Observador fuentes de cancillería.
La lista prevé la eliminación de los aranceles de importación cobrados a los países del bloque en 87% del volumen de comercio con los europeos, índice que puede llegar a 90%, según el ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil (MDIC), Mauro Borges. Fuentes de la cancillería uruguaya dijeron a El Observador que el gobierno de José Mujica aspira a llegar al 90% del universo arancelario pues es lo que hace “viable” y “da sentido” a este tipo de acuerdos, y que se proyecta alcanzar ese guarismo en el próximo conclave de diplomáticos de ambos bloques.
Según el ministro brasileño, faltan algunos detalles que podrán aumentar la oferta a 90%.
El avance se obtuvo durante una reunión del Mercosur, el pasado miércoles en Montevideo. El armado final de la propuesta se hará el 29 de abril durante un nuevo encuentro en Montevideo. Venezuela no participa de las negociaciones con la UE.
Al contrario de lo que ocurría hasta el mes pasado, cuando la construcción de la propuesta única chocaba con algunos reparos de Argentina, que se negaba a abrir totalmente su mercado, los socios del Mercosur salvaron sus principales divergencias. La nueva postura de Argentina sorprendió al gobierno brasileño.
“Ellos son otros”, dijo el ministro norteño. El informe de los negociadores es que los argentinos se habrían dado cuenta de que el acuerdo con la UE es importante y que no pueden quedarse solos.
El acuerdo Mercosur-UE se negocia desde 1988 sin grandes avances, pero ahora Brasil quiere relanzarlo como forma de suplir la caída de las preferencias arancelarias del denominado Sistema General de Preferencias europeo y de obtener nuevas palancas para impulsar su crecimiento económico.
También se entiende en Brasil que la menor disponibilidad de recursos en Europa para subsidiar productos agropecuarios, como consecuencia de las dificultades fiscales de algunos de sus miembros, puede abrir oportunidades al Mercosur.
Históricamente, la UE se ha mostrado renuente a abrir su mercado a la competitiva producción agropecuaria de los países sudamericanos que exportan productos básicos y manufacturas basadas en recursos naturales e importa bienes industriales desde el viejo continente.