El alto funcionario justificó la medida debido a los choques escenificados el pasado miércoles entre las fuerzas antimotines y los enemigos del TLC en 13 ciudades donde se llevaron a cabo protestas públicas.

Lee argumentó que hubo daños millonarios a la propiedad y que las autoridades exigirán una indemnización económica a los líderes de la Alianza contra el TLC en Seúl y sus ocho representaciones provinciales.

El ministro de Justicia Kim Sung-ho y la fiscalía anunciaron que están investigando lo ocurrido y que tomarán una actitud severa hacia quienes dirigieron y participaron en las marchas contra el tratado.

Pero la coalición aseguró que ya está proyectando nuevas demostraciones públicas el 29 de noviembre y el 6 de diciembre, para protestar contra la prohibición de expresar en la calle su estado de ánimo.

Las fuerzas de seguridad surcoreanas, que movilizaron esta semana a miles de efectivos, dijeron que un total de 73 mil 700 personas tomaron parte en las marchas y muchas de ellas se enfrentaron a las autoridades.

Un total de 21 manifestantes fueron detenidos en Kwanju y seis en Taejon, en tanto se registraron decenas de heridos.

Corea del Sur y Estados Unidos han llevado a cabo cuatro rondas negociadoras sobre el acuerdo comercial desde principios de año y planean concluirlas a más tardar en marzo, para que los cuerpos legislativos de ambos países lo ratifiquen en junio.

Pero los trabajadores de las industrias y los agricultores temen que la invasión de mercancías y productos norteamericanos libre de aranceles vaya a causarles perjuicios irreparables a sus puestos de trabajo y a sus ingresos.

Los enemigos del acuerdo chocaron en octubre pasado en la isla turística de Jeju, en la costa sur de la península, donde se reunieron los negociadores surcoreanos y estadounidenses en su más reciente encuentro.