Bolivia, 15 años de sumarse a la iniciativa soberana ALBA-TCP
Por TeleSur | 29-4-21
Bolivia, 15 años de sumarse a la iniciativa soberana ALBA-TCP
La nación suramericana se integró a ese mecanismo en 2006, y regresó a él en 2020, tras la derrota del golpismo en las urnas.
Bolivia ingresó el 29 de abril de 2006, durante el primer Gobierno indígena del expresidente Evo Morales (2006-2019), a la entonces Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).
El acuerdo que dio ingreso a esa nación suramericana al ALBA-TCP fue firmado en el Palacio de Convenciones de La Habana, Cuba, por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez y el presidente de Cuba, Fidel Castro, quienes dan la bienvenida a la suscripción de Bolivia al tratado histórico.
Catorce años después, en noviembre de 2020 Bolivia anunció que retomaba sus vínculos con el ALBA-TCP, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), los cuales fueron rotos por el Gobierno de facto tras el Golpe de Estado de noviembre de 2019.
El regreso a esos mecanismos de integración guardan una estrecha relación con la victoria del Movimiento al Socialismo (MAS) en las elecciones del 18 de octubre de ese año, que llevaron a la presidencia y vicepresidencia al binomio Luis Arce-David Choquehuanca.
Durante esos comicios, en los que ganó con más del 55 por ciento de los votos escrutados, el MAS también alcanzó 75 curules para diputados y 21 para senadores, del total de 166 escaños del Legislativo.
Los movimientos populares bolivianos se mantuvieron movilizados durante meses para derrotar a la derecha nacional y sus aliados extranjeros, que intentaron perpetuar el Gobierno de facto.
Con un Gobierno del pueblo y para el pueblo nuevamente a la cabeza de esa nación, la Cancillería de Bolivia anunció, el 14 de diciembre de 2020, su decisión de restaurar los lazos diplomáticos con Irán, Venezuela, México, Cuba, Argentina y Nicaragua, los cuales fueron rotos tras el golpe de Estado.
En la senda de la Patria Grande
Bolivia se integró al ALBA-TCP en 2006, poco después de la creación de la alianza por Hugo Chávez y Fidel Castro. Ella surgió como una contrapropuesta al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), iniciativa neoliberal que promovió el Gobierno de Estados Unidos para saquear los recursos naturales de América Latina y el Caribe.
En esa línea de defensa de los pueblos latinoamericanos de las ambiciones geopolíticas de Washington, también han sido signficativos los esfuerzos de líderes como Nicolás Maduro (Venezuela), Daniel Ortega (Nicaragua), Raúl Castro y Miguel Díaz-Canel (Cuba), Evo Morales y Rafael Correa (Ecuador).
Durante la XVIII Cumbre del ALB-TCP, celebrada en diciembre de 2020, el canciller boliviano, Rogelio Mayta, mencionó logros concretos de ese mecanismo integrador en relación con su país, entre las cuales citó:
1. La solidaridad de los países que conforman el ALBA ha permitido mejorar la calidad de vida de miles de bolivianos.
2. En 16 años, en Bolivia se ha salvado la vida de varios niños de muy bajos recursos, con operaciones cardiológicas que se realizan de manera gratuita en el Cardiológico Infantil Latinoamericano “Dr. Gilberto Rodrígiuez Ochoa”, con sede en Caracas (Venezuela).
3. La Misión Milagro ha devuelto la vista a miles de bolivianos, y se ha extendido a 21 países más allá del área ALBA, devolviendo vista a más de 2.000.000 de personas.
4. El programa de alfabetización y postalfabetización permitió que aprendieran a leer y escribir 3.500.000 de personas. Gracias a ello, la Unesco declaró a Bolivia territorio libre de analfabetismo. Esta labor se realizó mediante el método educativo “Yo sí puedo”, desarrollado por Cuba.
5. Logros económicos: exportación de madera y textiles a Cuba, venta de alimentos y textiles a Venezuela, establecimiento del Banco del ALBA, el Sucre y otros más.
El ALBA-TCP conserva su carácter de instrumento de integración, complementación económica, social, política, productiva y de liberación de pueblos en la lucha contra el imperialismo y el neoliberalismo, como lo definió meses atrás el presidente boliviano Luis Arce.