Costa Rica. el camino se le llena de espinas al gobierno del Nobel Arias
14-9-07
El camino se le llena de espinas al gobierno del Nobel Arias
AP/Leslie Mazoch
La "luna de miel" vivida por el gobierno del presidente costarricense Oscar Arias, que asumió el poder el 8 de mayo de 2006, parece estar llegando a su fin, y el camino se le ha puesto cuesta arriba, en vísperas del referendo del 7 de octubre, que determinará el futuro del tratado de libre comercio con Estados Unidos.
Desde que asumió la administración, tras ganar los comicios en una reñida elección hace 19 meses, Arias, premio Nobel de la Paz de 1987, se empeñó en impulsar una serie de proyectos considerados por él estratégicos en su plan de gobierno.
Tras asumir el cargo, uno de sus ejes fue luchar por la ratificación del controvertido tratado de libre comercio suscrito entre Costa Rica y Estados Unidos.
Con el correr de los meses, la lucha en torno a ese pacto comercial provocó una de las mayores polarizaciones políticas ocurridas en Costa Rica en medio siglo.
El empantanamiento de la discusión en el Parlamento, donde el oficialismo tiene una mayoría relativa pero insuficiente, desembocó en la convocatoria a la consulta popular del 7 de octubre.
Una vez que el Tribunal Supremo de Elecciones hizo la respectiva convocatoria, Arias y miembros de su gabinete se lanzaron en una abierta carrera de convencimiento en favor del "Sí" al Cafta, como se conoce al pacto comercial por sus siglas en inglés.
En esa ruta, el mandatario logró atraer el apoyo de otras fuerzas políticas representadas en el Parlamento, con lo que parecía asegurarse una mayoría suficiente para ganar una votación en el plenario.
Pero el panorama sufrió un brusco cambio en la última semana. Un memorando que su vicepresidente y hombre de confianza, Kevin Casas y el diputado oficialista Fernando Sánchez, le enviaron al mandatario, en el que le recomendaban infundir una campaña de temor entre la población y amenazar financieramente a los alcaldes para forzarlos a sumarse a la campaña del "Sí", le han complicado el panorama al gobierno de Arias.
El polémico correo electrónico, filtrado por desconocidos a la prensa, ha desatado un polvorín político, que ha golpeado no solo al Gobierno sino a los sectores que apoyan al "Sí".
Casas se vio obligado a dejar de forma temporal el cargo de ministro de Planificación, que Arias le encomendó, mientras una auditoría investiga si en esa dependencia se usaron fondos públicos para favorecer a la tendencia pro-TLC con miras al referendo.
Aunque el Gobierno, cuyos voceros niegan que use recursos del Estado en favor del "Sí", consideró la decisión de Casas como "un acto de hidalguía", el escándalo no se detuvo allí.
La Asamblea Legislativa se encuentra convertida en un verdadero caldero. Las fracciones de los diversos grupos políticos allí representados tienen ya una semana de estar sumidos en ataques y contrataques.
Mientras el oficialismo trata de minimizar el caso del "memorando", las fuerzas pro "No" e incluso el Movimiento Libertario, afín al "Sí", se sumaron a las exigencias de pedir la destitución de Casas. En el mismo "zapato" se encuentra el diputado Sánchez, familiar cercano al mandatario Arias.
Por su parte, una alianza del "Sí", cuyo líder es un ex ministro de gobierno, ha pedido a ambos funcionarios apartarse de la contienda, en un claro intento por no deteriorar su imagen.
El presidente Arias, que hoy cumplió 67 años de edad, se encuentra alejado de las giras públicas desde hace dos semanas, y seguro lo estará por varios días más, debido a una lesión en el tendón de Aquiles de su pie derecho. Esta lesión prácticamente lo sacó del ring, en un momento en que se calentaba la campaña por el "Sí" y el "No".
Ante el escándalo que desató el polémico memorando, fuerzas políticas representadas en el Parlamento, y que han venido actuando en una suerte de concubinato con el Gobierno, parecen decididas a tomar distancia.
Y es que como es tradición en este país centroamericano, dentro de poco arrancará la carrera hacia los próximos comicios generales, programados para febrero del 2010. Y es allí cuando cada quien trata de "llevar agua a su molino".
Según informaron ayer jueves medios locales de prensa, Arias, recluido en su habitación, no quiso celebraciones de su cumpleaños 67.
"No quiso nada, varios amigos le ofrecieron hacer una cena y celebrar pero no, además, como tiene el pie malo no quiso nada, hasta que pase el referendo", dijo al matutino La Teja, Vivian Quesada, asesora y amiga personal del mandatario.
Y como dice un refrán popular "el que no quiere caldo (le dan) dos tazas", otro inconveniente se le cruzó en el camino al Gobierno. Numerosos diputados se agruparon para solicitar a la fiscalía del país que investigue un caso de presunta evasión tributaria, que salpica al ministro de Seguridad Pública, Fernando Berrocal, uno los miembros más influyentes en el gabinete del mandatario.
Pese a todo, las encuestas de opinión otorgaban, al menos hasta hace poco tiempo, un muy buen concepto de la ciudadanía acerca de la gestión del presidente, cuyo reto, según lo proclama, es sentar las bases para que Costa Rica se convierta en un país desarrollado en las próxima décadas.
