Chile - El TPP y sus compromisos
Chile - El TPP y sus compromisos
Por Álvaro Arévalo P. 4-3-16
El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica, TPP, que inicia su etapa de análisis para ratificación en el Congreso, ha generado gran revuelo.
El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica, TPP, que inicia su etapa de análisis para ratificación en el Congreso, ha generado gran revuelo. Sin embargo, desde la propiedad intelectual cabe la duda de si estamos realmente preparados como país para asumir los compromisos que ahí se suscriben.
Esta pregunta surge a la luz de los tratados vigentes en Chile, en particular del TLC con EEUU, cuya ratificación significó modificaciones a la legislación y a su vez incomodidad en nuestras autoridades, en especial a la imagen país con la tradicional aparición de Chile en la Lista Roja por incumplir compromisos en esta área. La eventual ratificación del TPP, cuyo principal impulsor es EEUU, lleva a plantearnos si debemos reafirmar la obligatoriedad de asumir estándares foráneos que ya han significado desavenencias entre el Ejecutivo y el Poder Legislativo, e incluso superiores en materias que ni siquiera han podido incorporarse a nuestra legislación, como las Medidas Tecnológicas de Protección.
Si bien nuestro país ha avanzado en la protección de la propiedad intelectual, la experiencia nos ha demostrado que esta ruta se vuelve más pesada cuando se adoptan niveles de protección no acordes a nuestra idiosincrasia, cultura, tiempos y desarrollo institucional, corriendo el riesgo de volver a “incumplir”, y sólo ahí cuestionarnos si los compromisos asumidos se adecúan a nuestra realidad. El más reciente ejemplo de este “sinceramiento” es el informe publicado en enero por la Fiscalía Nacional Económica sobre el Sistema de Protección Suplementaria de Patentes en Chile, que analiza las controversias que, en materia de libre competencia, ha generado la adopción de compromisos suscritos en el citado TLC.
En consecuencia, y más allá del TPP, la mantención de esta política bajo la premisa de una mayor participación comercial, sin un análisis sólido y previo de nuestra realidad, nos mantiene en un “zapato chino”, algo masoquista a estas alturas y que puede traernos sanciones. Como sociedad debemos cuestionarnos si estamos preparados para ratificar, de manera responsable, este acuerdo que puede comprometernos y amarrarnos más de lo que podemos.
*El autor es Abogado Estudio Villaseca.
