La Cámara de Industria mantiene incertidumbre sobre impacto del TLC Uruguay-China en el Mercosur y pide al gobierno flexibilización laboral
Por M24 | 8-12-21
La Cámara de Industria mantiene incertidumbre sobre impacto del TLC Uruguay-China en el Mercosur y pide al gobierno flexibilización laboral
Tanto Brasil como Argentina se encuentran entre los cuatro principales destinos de exportación, junto a China y a Estados Unidos.
Las solicitudes de exportación, zonas francas incluidas, sumaron US$ 1.097 millones en noviembre, un 60% más en relación al mismo mes de 2020, según informó la semana pasada Uruguay XXI. En lo que va del año «las exportaciones totalizaron US$ 10.390 millones, registrando un aumento de 42% respecto al mismo período de 2020».
Brasil se ubicó como segundo destino de exportación en noviembre, con US$ 227 millones, cifra que representa el 27% del total exportado en el mes. Además, las ventas registraron un aumento de 108% en comparación con los envíos a ese país en noviembre de 2020,
Por su parte, Argentina se posicionó nuevamente como cuarto destino de exportación en noviembre, superando a Estados Unidos por casi US$ 13 millones. Las ventas hacia el otro lado del charco fueron de US$ 57 millones, un aumento de 46% en comparación con noviembre de 2020.
Ayer la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU) le presentó al gobierno un análisis que elaboró durante un mes, sobre el posible impacto de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con China.
El presidente de la CIU, Alfredo Antía, dijo tras un encuentro mantenido ayer con integrantes del Poder Ejecutivo, que con la firma del TLC es probable que algunos sectores salgan perjudicados «y seguramente va a haber herramientas de políticas públicas tanto para las empresas como para los trabajadores».
«Este es un camino que hay que recorrer: identificar claramente de qué modo podemos mantener a los soldados y al comercio de pie”, acotó, según publica este miércoles El País.
Una de las principales conclusiones a las que arribó el estudio de la CIU es que para la mayoría de los sectores un TLC con China “sería beneficioso para Uruguay”, pero «existen visiones e intereses muy dispares”.
Según surge de la encuesta que elaboró la gremial entre sus integrantes, el 29% opina que el impacto del TLC sería “positivo”, el 13% “muy positivo”, el 28% es “neutral”, el 17% “negativa”, el 10% “muy negativa” y el 3% “no sabe o no contesta”.
Una de las incertidumbres que se expresan en el informe refiere a lo que pueda ocurrir con el Mercosur si Uruguay logra avanzar de manera bilateral con el gigante asiático, ya que el bloque regional es el “destino principal de lo producido por la industria manufacturera”.
Al término de la reunión entre el gobierno y los empresarios, el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, informó que “Uruguay viene avanzando a muy buen ritmo y probablemente se cumpla con el plazo de entregar las propuestas uruguayas ahora mismo y antes de fin de año tal vez, si las cosas con China avanzan al ritmo que se prevé, se tenga esa prefactibilidad”.
Consultado respecto al impacto que pueda tener en el Mercosur un acuerdo de estas características entre Uruguay y China, el jerarca respondió que «hay que contestar esas preguntas cuando se plantean los problemas y no antes de tiempo”.
La incidencia positiva de las exportaciones a Brasil se debe a la energía eléctrica y malta, cuya variación interanual fue de 2707% y 656%, mientras que en Argentina se explica por un aumento de las ventas de energía eléctrica (100%), vehículos (165%) y productos farmacéuticos (62%). Incluso en el acumulado enero-noviembre de 2021, la variación fue positiva. Las ventas aumentaron 54%, alcanzando los US$ 437 millones, producto de mayores envíos de energía eléctrica (203%), autopartes (29%), productos farmacéuticos (63%) y plásticos y sus manufacturas (45%), entre otros, según detalla Uruguay XXI.
Ganadores y perdedores
El informe de la CIU estableció colores de las luces del semáforo para determinar el nivel de impacto que podría tener el TLC en los sectores locales.
Es así que el rojo es para los sectores “sensibles”; en verde es para los “ofensivos” es decir los que podrían verse beneficiados con el TLC y amarillo para aquellos que mantendrían una posición «neutra».
En este sentido, los sectores «sensibles» son el metalúrgico y el aluminio, el automotriz, el del calzado, el textil y de vestimenta, el de la perfumería, tocador y cosmética, el de curtiembres, el siderúrgico, el de plástico y el de vidrio.
Los “ofensivos” son los molinos arroceros, la industria frigorífica, los lácteos y los vinos.
Los de posición «neutra» pertenecen a la Cámara Industrial de Alimentos, al sector farmacéutico, el químico, el de la industria naval y el de la maquinaria agrícola.
Las definiciones políticas que piden los empresarios
El empresariado manifiesta en el informe que este TLC es “una oportunidad para abordar los desafíos de una agenda amplia que garantice una buena implementación y aprovechamiento del acuerdo”, en relación a los «ajustes, cambios y reformas que están pendientes en el país para avanzar en una agenda amplia de competitividad”.
“Pasa por abordar los diferentes mecanismos que existen en la legislación laboral que rigidiza este mercado y hacer perder competitividad al país y a sus sectores exportadores en los mercados globales”, señala el documento al que accedió El Observador.
Asimismo, se señala el costo de la energía como otra problemática que interfiere en la competitividad.
