La lección Mexicana
La lección Mexicana
Por JOSÉ FÉLIX LAFAURIE RIVERA, 21-11-11
La modernización de la ganadería requiere ver experiencias exitosas. Las giras técnicas son la mejor manera para compararnos. En Fedegán van 17 giras nacionales y con la de México, 5 internacionales, después de visitar Argentina, Uruguay, Brasil y USA. En cada una, más de 200 ganaderos pueden ver qué hacer ante la competencia. ¿Qué pasó con la economía ganadera del país azteca?
México avanzó con el TLCAN, firmado en 1994, con muchos resultados positivos pero no todos, por su alto costo económico y social, cuyas consecuencias aún no terminan. Para Colombia el TLC con EE.UU., a juzgar por la experiencia de México, promete ser tortuoso y miles de productores quedarán en la calle víctimas de un acuerdo asimétrico, no sólo por el tamaño de las dos economías, sino por el poder de negociación de la contraparte.
¿Qué pasó en los 16 años del TLCAN? México tenía pequeños y medianos productores que han ido desapareciendo. Para los analistas, incluso del mismo Gobierno, el TLC “no ayudó a la economía mexicana a crecer al mismo ritmo que la demanda de empleo”. “Entre 1994 y 2002, perdió 1,3 millones de empleos agrícolas”. La explicación: en la primera década de vigencia, las importaciones desde EE.UU. crecieron 234%, y desde Canadá bordearon los US$136 mil millones, al pasar de US$2,9 mil millones a US$8,8 mil millones.
En Colombia, la ganadería es 82% de pequeños productores, es decir, 403.000. Es probable que muchos salgan del mercado por no ser competitivos, y en especial, por las restricciones sanitarias que México no tenía por gozar de similar estatus cuando se puso en marcha el Tratado. El sector lácteo colombiano -donde está la mayor parte de los pequeños productores- tendrá una amenaza adicional: la entrada sin límites ni arancel de los lactosueros (EE.UU., produce más de 5.250 toneladas al día, más que las importaciones anuales de Colombia).
Mirando la otra cara de la moneda, el sector pecuario mexicano se transformó. Los ganaderos piensan en la competitividad, analizan costos y las tecnologías que permiten ventajas comparativas, lo que ajustó la rentabilidad y concentró la producción. Los establecimientos ganaderos son grandes en número de bovinos e igualmente en producción, con 30 litros de leche por vaca al día. Eficiencia, valor agregado, integración en la cadena y la formalidad, fue su tabla de salvación.
¿Podrán hacerlo los productores colombianos? El reto es grande porque la ganadería especializada no supera en promedio los 17 litros vaca-día.
En México se puede comprobar, como en los otros países visitados, que el ganadero encontró la competitividad gracias a una infraestructura de transporte envidiable, vial y férrea -con trocha ancha para transportar grandes volúmenes- y ayudas internas, desde subsidios en la energía eléctrica hasta créditos abundantes a costos bajos.
¿Cuáles vías tenemos, así sean sólo para el mercado interno? Los grandes proyectos viales tardíos servirán, pero para que ingrese la competencia a los centros de consumo, mientras nuestra producción quedará atrapada por la desastrosa red terciaría nacional. Ya lo sentimos a propósito del debate sobre el desabastecimiento de productos lácteos.
Hay mucho que hacer y el tiempo no está de nuestra parte. Tendremos que recuperar el tiempo perdido, evitar la pérdida de empleos y la ruina de cientos de miles de productores pequeños y medianos, que llevarán la peor parte.
