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TLC: ¿Competencia agrícola justa?

OPINIÓN

TLC: ¿Competencia agrícola justa?

Marx Aguirre Ochoa/Cambio de Michoacán, 10-1-08

A partir del primero de enero de este año entró en vigor la desgravación total de aranceles a los productos agropecuarios que comercializan Canadá, Estados Unidos y México, en el marco del Tratado de Libre Comercio vigente. Ello significa que a partir de ese día, un cliente mexicano puede comprar maíz, frijol, arroz y azúcar, entre otros productos en cualquiera de los tres países donde los encuentre más baratos y en la calidad que los necesite.

Por su parte los productores de las partes involucradas tendrán que hacer lo posible para obtener la preferencia de los compradores, en términos de competitividad, que no son equivalentes a la práctica desleal de vender por debajo de los costos reales de producción. Competitividad a cambio de calidad de los recursos naturales, tecnología, experiencia productiva y capacidad gerencial.
En estos aspectos, simplemente, ¿es competitivo el productor de maíz mexicano, frente al productor de Estados Unidos y Canadá? Las desventajas son dramáticas: mientras en el país vecino se obtienen en promedio 18 toneladas de maíz por hectárea, en México se obtienen tan sólo 2.5 toneladas. ¿Quién puede entonces vender a precios más bajos?

¿Cuál es la explicación?, aquí los campesinos han carecido por años de los apoyos suficientes. En cambio, en Estados Unidos, sólo para mencionar este país, los apoyos de distinto tipo y los subsidios gubernamentales son enormes, con una constante para proteger sus propios intereses. En México el campesino maicero, ejidatario o comunero, invierte en una hectárea 100 unidades monetarias y cosecha 75 cuando bien le va. Pierde en lugar de ganar.

Contrariamente a lo que sucede en México en materia agrícola, en Estados Unidos hace más de un año iniciaron un intenso debate sobre la Farm Bill, o Ley Rural, que normalmente tendría que renovarse en 2007, luego que la vigente se promulgó en 2002.

La Farm Bill es un instrumento básico de política agrícola y alimentaria del gobierno estadounidense, de carácter multianual, con vigencia de cinco años y que otorga el marco normativo para las políticas productivas, de conservación, de nutrición, de comercio internacional, subsidios domésticos, exportación y créditos, representando en consecuencia el instrumento clave en la política agrícola del país vecino. La negociación del Farm Bill depende en gran medida de los intereses y la influencia que ejerzan importantes transnacionales del sector, y una amplia coalición de grupos de granjeros y rancheros organizados.

Por otro lado, y de conformidad con el Acuerdo sobre la Agricultura de la OMC, Estados Unidos está sobrepasando sus subsidios, con sus listas de concesiones. Durante el año 1999 se debían otorgar 19 mil 899 millones de dólares y para cada año subsecuente, estos apoyos no debían exceder de 19 mil 103 millones de dólares. No obstante, los montos que Estados Unidos otorgó en cada uno de los años 1999 a 2002, 2004 y 2005, rebasaron tales compromisos.

Esta política comercial de Estados Unidos tiene alto impacto que va mucho más allá de lo económico y afecta seriamente la sustentabilidad social y ambiental de muchos países, sobre todo en vías de desarrollo. Es una política trazada por las grandes corporaciones con base en la fijación de precios internacionales por debajo del costo de producción, causando la quiebra de millones de agricultores en los países que no cuentan con la misma fortaleza económica de los Estados Unidos.

The time is right and the momentum is growing.Es el momento oportuno, para buscar y pelear condiciones equitativas entre los países y hacer el libre comercio con visiones de sostenibilidad y competitividad para todos.Ask Congress to revamp the Farm Bill. Pareciera que los tratados comerciales con los Estados Unidos son instrumentos de dominación y pérdida de soberanía alimentaria, según la experiencia que está viviendo el campo mexicano. Pareciera que no sólo se trata de dominación simple, sino de una dependencia legal que pretende hacerse pasar por legítima.

Se dice que México ahora exporta más y que la balanza comercial es favorable, las cifras utilizadas en estas afirmaciones encubren realidades reflejadas en interrogantes como estas: ¿Para beneficio de quién, de los jornaleros aguacateros, freseros, cañeros, meloneros, entre otros? Las evidencias muestran que los principales beneficiados han sido las compañías extranjeras que operan estas líneas. ¿A esa balanza comercial agrícola se refieren los defensores del TLC?
Son momentos de replantear decisiones y medidas proteccionistas, en beneficio de los intereses nacionales de las mayorías rurales y del conjunto de la sociedad mexicana.


 source: Cambio de Michoacán