En noviembre de 2001, China y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por su sigla en inglés) emprendieron negociaciones para el establecimiento de un área de libre comercio.
Un año más tarde firmaron un acuerdo marco para el TLC proyectado. Dicho TLC, que implica un mercado libre de aranceles de más de 1.700 millones de personas, entrará supuestamente en vigor en 2010 en los seis países miembros fundadores de la ASEAN (Brunei, Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur y Tailandia), y en 2015 en los cuatro restantes (Birmania, Camboya, Laos y Vietnam). La implementación del acuerdo marco se daría en etapas. Por ejemplo:
– En julio de 2005 entró en vigor un acuerdo del tipo conocido como de ‘cosecha temprana’, que abarca el comercio de bienes.
– En 2004 concluyeron las negociaciones para un mecanismo de solución de diferencias que se implementaría en 2005.
– Las negociaciones sobre el comercio de servicios llegaron a término y en enero de 2007 se firmó el acuerdo correspondiente, que se implementaría en julio de 2007.
– La firma del acuerdo sobre inversiones China-ASEAN estaba prevista para la Cumbre de la ASEAN en diciembre de 2008 en Tailandia.
China, a su vez, firmó en octubre de 2008 un TLC bilateral por separado con Singapur, uno de los miembros de ASEAN. El gobierno en Beijing además ha estado trabajando arduamente para concluir por separado un sinnúmero de acuerdos bilaterales de menor porte y más específicos con países vecinos miembros de la ASEAN, tales como el infame tratado bilateral de inversiones Filipinas-China (que fue protagonista de enormes escándalos de corrupción en las Filipinas en 2007), la armonización de las normas de inocuidad de los alimentos con Tailandia (para facilitar el comercio agropecuario), y numerosos acuerdos con los países del Delta del Mekong.
La política en torno al acuerdo China-ASEAN es un asunto delicado, ya que los gobiernos de la ASEAN quieren evitar el dominio de China a la vez que pretenden construir sus economías en la interacción con China, especialmente en vista de la desaceleración de la demanda de los mercados de EEUU y Europa. China a su vez está escalando posiciones en la cadena de valor de la industria manufacturera, razón por la cual deja de necesitar bienes primarios que hasta hace poco importaba de los países de la ASEAN que los producen, al mismo tiempo que globaliza con celeridad su demanda de recursos naturales tales como minerales y petróleo. Por último, la entrada en pleno vigor de un régimen de comercio agropecuario con China libre de aranceles a partir del 2010 suscitó muchos temores en el ámbito de la ASEAN.
última actualización: mayo de 2012
Foto: MangAndri Kasep / CC BY 2.0