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El Tratado de Libre Comercio entre EE.UU. y Colombia no debería ser aprobado hasta que se enjuicien a los autores de los asesinatos contra los activistas

22-7-08

Los obreros siderúrgicos se unen a los activistas de Los Ángeles para exigir que Occidental Petroleum cese su complicidad en el abuso contra los derechos humanos de Colombia

El Tratado de Libre Comercio entre EE.UU. y Colombia no debería ser aprobado hasta que se enjuicien a los autores de los asesinatos contra los activistas

LOS ÁNGELES, 22 de julio /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ — Los miembros del sindicato United Steelworkers (USW), junto con activistas laborales y comunitarios, manifestaron hoy delante de las oficinas centrales de Occidental Petroleum para dar su apoyo a un tribunal del pueblo en Bogotá, Colombia, que está conociendo las pruebas relacionadas con los asesinatos y las amenazas de muerte contra los activistas sindicales en los que se presume que la compañía habría dado su aprobación.

"Las empresas que operan en las áreas de conflicto no deberían contribuir deliberadamente ni tampoco contribuir sin darse cuenta de ello al abuso contra los derechos humanos", dijo Terry Bonds, director del Distrito 12 del USW. "Occidental Petroleum debería asegurar que las violaciones contra los derechos humanos no están siendo cometidas por agentes del estado o sus servidores en función de defender los intereses de la compañía".

Bonds representa a los miembros del USW de California, incluyendo unos 80 obreros empleados por Occidental Petroleum en Long Beach.

Los manifestantes coreaban eslóganes como "Basta Con La Violencia" y piqueteaban con carteles, al mismo tiempo que compilaban firmas para una petición al Congreso estadounidense. También entregaron una carta al Dr. Ray R. Irani, presidente de la junta directiva y presidente y CEO de Occidental Petroleum.

En la carta, el sindicato de obreros siderúrgicos United Steelworkers Union (USW) expresó su preocupación sobre la complicidad de Occidental Petroleum en los abusos contra los derechos humanos de Colombia. El sindicato instó a la compañía de "confesar" el alcance completo de su participación en el atentado de Santo Domingo del 13 de diciembre de 1998 y expresó su preocupación sobre el supuesto apoyo económico y logístico prestado por la compañía a la 18 Brigada del Ejército colombiano, que ha cometido numerosos abusos contra los derechos humanos, entre ellos el asesinato de tres líderes sindicales en agosto de 2004. Existen pruebas de que la Brigada, que ayuda a proteger el oleoducto Caño Limón de la empresa, sigue instigando y secundando a los grupos paramilitares.

El Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP), que se celebrará hoy y mañana en Bogotá, está poniendo al descubierto a empresas transnacionales como Occidental Petroleum, British Petroleum, Coca-Cola, Nestlé y Chiquita Brands International por su presunta participación con las fuerzas de seguridad colombianas y los grupos paramilitares de derecha en silenciar y algunas veces asesinar a los sindicalistas y los activistas comunitarios. El tribunal está compuesto por 130 miembros e incluye a expertos en derecho internacional, derechos humanos y derecho humanitario internacional.

La falta de interposición de acciones judiciales y condenas contra aquellos responsables de los asesinatos de activistas de derechos humanos, sindicalistas, periodistas, maestros, trabajadores de atención médica, personas indígenas, agricultores campesinos y funcionarios electos han llevado a los líderes demócratas del Congreso estadounidense a postergar el voto del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre EE.UU. y Colombia hasta que el gobierno colombiano compruebe que está activamente persiguiendo a los autores de dichos delitos y enjuicie a los mismos.

Los líderes sindicalistas siguen siendo matados con impunidad. Desde 1991, más de 2,300 sindicalistas han sido asesinados. Durante el mandato del Presidente Uribe se han reportado condenas en 59 casos de homicidio de sindicalistas, lo que representa un promedio de menos de una condena al mes durante los últimos cinco años. De las 59 condenas, sólo 22 corresponden a los más de 450 asesinatos cometidos desde que Uribe asumió la presidencia en agosto de 2002.

Desde que Occidental Petroleum descubrió el yacimiento petrolífero de Caño Limón en 1983, su presencia en la región Arauca de Colombia ha atraído a los participantes de la guerra civil: los guerrilleros izquierdistas, el ejército y los paramilitares. Según la organización Amnesty International, muchos de los abusos contra los derechos humanos realizados por estos grupos han ocurrido en áreas y comunidades que lindan con el gasoducto Caño Limón de la empresa. Occidental Petroleum ha admitido de haber pagado a los guerrilleros a cambio de ser dejada en paz.

Según el periódico LA Times, una compañía de seguridad (la estadounidense AirScan) contratada por Occidental Petroleum para monitorear los movimientos de la guerrilla, proporcionó las coordenadas a los pilotos del ejército colombiano cuando éstos lanzaron bombas de dispersión en Santo Domingo, un pueblo cercano a los gasoductos de la empresa. En el ataque murieron 17 civiles, incluyendo siete niños.

En el pasado, Occidental Petroleum apoyó a los militares colombianos en su intento de desalojar por la fuerza a la tribu indígena U’Wa de sus tierras ancestrales para ceder el paso a los gasoductos de la compañía.

La compañía cabildeó con éxito al gobierno estadounidense para ampliar las operaciones militares en Arauca y fue un grande partidario del Plan Colombia, un esfuerzo multimillonario para financiar al ejército del país con el pretexto de ayudarlo a combatir el narcotráfico.

Una de las otras compañías acusadas es Drummond, que fue demandada por el USW por su presunta participación en el asesinato de tres líderes sindicalistas en 2001. El sindicato de los líderes asesinados se ha declarado en huelga contra Drummond en Colombia, aumentado así su vulnerabilidad a violentas represalias.

Además de la manifestación en Los Ángeles, se realizarán eventos hoy ante las oficinas centrales de Coca-Cola en Atlanta y de Chiquita Brands en Cincinnati. También se realizarán esfuerzos a nivel local en Nueva York y Boston.

USW, el sindicato industrial más grande de Norteamérica, representa a 850,000 obreros activos empleados en los sectores de petróleo, productos químicos, papel, metales, caucho y servicios.

Para obtener más información sobre la campaña del USW contra la violación de los derechos humanos en Colombia y su oposición al TLC entre EE.UU. y Colombia, visite el sitio: www.usw.org/ .


 Fuente: Hispano de Tulsa